Iglesia de Nuestra Señora de la Zarza - Yélamos de Abajo, Guadalajara
Dirección: Calle Luis de Lorenzo, 16, 19143 Yélamos de Abajo, Guadalajara, España.
Especialidades: Iglesia católica.
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Ubicación de Iglesia de Nuestra Señora de la Zarza
La Iglesia de Nuestra Señora de la Zarza es un lugar de gran interés para los amantes de la arquitectura y la historia. Ubicada en la tranquila localidad de Yélamos de Abajo, Guadalajara, España, en la dirección Calle Luis de Lorenzo, 16, esta iglesia es un verdadero tesoro escondido que vale la pena visitar.
Construida en el siglo XVI, la iglesia cuenta con una impresionante fachada de estilo renacentista y una torre de planta cuadrada que data del siglo XVII. El interior de la iglesia es igualmente impresionante, con una nave única y una bóveda de crucería que crea un espacio verdaderamente majestuoso. Los visitantes también pueden admirar varias capillas laterales y un hermoso retablo mayor que data del siglo XVIII.
La Iglesia de Nuestra Señora de la Zarza es una iglesia católica, lo que significa que los servicios religiosos se llevan a cabo regularmente. Si estás interesado en asistir a una misa o simplemente quieres explorar la belleza de la arquitectura y el arte sacro, esta iglesia es definitivamente una parada obligatoria.
Además de su belleza arquitectónica y su importancia histórica, la iglesia también es conocida por su tranquilidad y serenidad. Los visitantes suelen sentirse relajados y en paz mientras exploran sus hermosos pasillos y admiran su impresionante arte sacro.
En cuanto a la información práctica, la Iglesia de Nuestra Señora de la Zarza no tiene un número de teléfono o página web oficial, pero se puede encontrar fácilmente en la dirección mencionada anteriormente. La iglesia está abierta al público en horarios regulares, aunque se recomienda verificar los horarios antes de visitarla.
Hasta ahora, no hay opiniones disponibles en Google My Business para la Iglesia de Nuestra Señora de la Zarza. Sin embargo, esto no significa que no valga la pena visitarla. Al contrario, su falta de opiniones puede ser una oportunidad para ser uno de los primeros en descubrir y compartir su belleza con el mundo.